La estiba debe tener en cuenta las propiedades físicas de la mercancía, como su peso y si es líquida o sólida. Para esto es importante realizar un cálculo de la capacidad de carga de tu unidad de transporte, esto te permitirá determinar cuanta mercancía puedes transportar. Además, es importante colocar las cargas líquidas debajo de las sólidas para evitar derrames y daños, y colocar las cargas más ligeras encima de las pesadas para evitar aplastamientos.